A ver si alguien entiende de qué habla este señor y tiene la cortesía de explicármelo.
El Observador - 03.04.06 - Correo de lectores
Sana introspección
Más de una vez, en conversaciones generales, amigos que me estiman soportaron mis ideas sobre comportamientos sociales, las causas y objetivos de ciudadanos, gente común y políticos, y les despierto la necesidad de confrontarme con visiones e intereses personales, sectoriales y simplemente culturales, o de mirarme con aprecio y profunda interrogación… o con la tierna concesión del “dejarme ser”. ¿Uno… a contramano?... ¡son miles! Eso me ha llevado a cuestionarme y analizar mis motivos y razones, las causas y efectos buscados, y en cruel análisis definirme: ¿soy inmodesto?, ¿petulante?, ¿soberbio? Puede que actúe modestamente, pero no soy humilde y explicándolo, no siento inferioridad ante mis semejante, aunque les tenga miedo o admiración. Si eso es genético, agradezco el don a mis ancestros. Si eso es cultural, agradezco a Batlle y a Varela, porque reconozco que es un ingrediente fundacional de la democracia como sistema de coexistencia humana a desarrollar. Creo que me identifico como un privilegiado por ese don. ¿Cuál o qué es para invitar a compartirlo? Un don que me impulsa a pensar, a la praxis del espíritu crítico, a la búsqueda de la esencia de las cosas de la vida, de los conceptos y procedimientos; y que creo me acerca a la equidad y a la justa valoración de los hechos que contemplo y en los que participo. Es por esa existencia de conciencia o de espíritu que comunico mis ideas a mis iguales, los amigos, la gente y sus jerarquizados empresarios y políticos, y difundo mis ensayos en conversaciones y cartas públicas. ¿Por qué lo hago?, porque es mi espontánea manera de existir en sociedad, porque proponiendo me siento útil aunque ingenuamente olvide lo difícil que es proyectarse en la mente ajena. ¿Con qué objeto?, justificar mi existencia fruto de la Evolución, exaltando el azar de mi ser orgánico con la actividad intangible de la mente ¿Evolución del Espíritu, quizás?
Arq. P. Rodríguez Costas CI 570.950-0
2 comentarios:
No tiene desperdicio. Si tuviera que comentarlo no sabría por donde empezar. Ves que no sabemos valorar lo que tenemos. Un intelectual de esta talla y me resultaba totalmente desconocido. No encuentro nada de este hombre en google. Por favorrrr, me muero por leer algo más.
Igualmente Daniela, me parece que es un poco complicado para el nivel de tu lector promedio.
para esta nota el traductor largó esto:
"Yoooooooooooooooo, yo, yo y yo"
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